martes, 27 de febrero de 2018

Una gaviota migradora, escasa e irregular, pero en expansión. Gaviota cana. Larus canus. Gaviota del Nordés. Common gull.

Tras la publicación la semana pasada de la entrada referente a la Gaviota del Caspio, hoy quiero presentaros a otra representante de ese selecto grupo gaviotas poco habituales en nuestro entorno y que este invierno nos están haciendo disfrutar con su presencia por tierras asturianas. Me estoy refiriendo a la Gaviota cana (“Larus canus”) de la que hemos podido disfrutar este invierno de varios ejemplares en el entorno de la playa de San Lorenzo de Gijón.



La Gaviota cana, es tal vez, de ese selecto grupo que he querido denominar como gaviotas poco habituales en nuestro entorno, la que últimamente se deja ver por aquí con mayor frecuencia, sobre todo en ese entorno de la playa de San Lorenzo o la desembocadura del rio Piles, sin olvidarnos de otro muy favorable para ellas, como es el de la playa de Bañugues.



Aunque es un invernante regular por nuestras costas, pero siempre en cantidades muy pequeñas, la Gaviota cana es una gaviota muy habitual en el norte de Europa, tal como parece indicar su nombre en inglés “Common Gull”, que significa "Gaviota común". 



El ejemplar que he elegido como protagonista de esta entrada, es uno adulto con su precioso plumaje invernal que pude fotografiar el pasado mes de enero, precisamente en la desembocadura del río Piles en Gijón. He querido que sea él, porque considero que a esa edad es cuando han desarrollado su plumaje más bello y también porque su presencia a esas edades es menos habitual en nuestro entorno, ya que lo más frecuente es encontrarnos ejemplares de primer (el más habitual) o segundo invierno.



La mala noticia al respecto de este bello ejemplar, es que los escasos momentos en que le vi caminar, pude comprobar que cojeaba algo. Tras examinar detenidamente las fotografías, pude descubrir que el motivo era debido a tener un sedal, con anzuelo incluido, enrollado en su pata izquierda y que le constreñia notablemente el riego circulatorio de la misma, Una verdadera pena.



La Gaviota cana (“Larus canus”) es una gaviota de mediano tamaño, similar al de otra de las gaviotas poco habituales, la Gaviota de Delaware, a la que dedique una reciente entrada y con la que además de por su tamaño, muestra un mayor parecido. Su tamaño ronda los 40-45 cm, con una envergadura de entre los 100-130 cm y un peso en torno a los 580 gr. No existe dimorfismo sexual en esta especie.



Se pueden diferenciar en ella tres grupos de edad, ya que alcanza el de adulto en su tercer año.

En el plumaje de invierno (septiembre-marzo) del ave adulta podemos apreciar como las partes inferiores, la cabeza, la cola y el cuello son de color blanco, mientras que el dorso y las alas son de color gris azulado, con las puntas de las alas negras y con manchas blancas. A este respecto, comentar que la etimología de su denominación científica (“Larus canus”), proviene de los términos latinos "Larus" o gaviota u otro ave marina grande, y "Canus" que significa gris. 



Cuando las vemos en vuelo o con las alas desplegadas, podemos apreciar claramente como las alas son bastante estrechas y presentan unos característicos (para esta edad) grandes “espejos” blancos en las puntas de las primarias más externas (P9 y P10).



La cabeza es redondeada y presenta un discreto rayado grisáceo que se hace más intenso en la zona de la nuca. 



El pico es pequeño, estrecho y sin ángulo gonideal. Es de coloración rosácea apagado y presenta una estrecha franja negruzca, mal definida, cerca de la punta.



Los ojos son redondeados con el iris oscuro.



Las patas tienen un color amarillo verdoso.



Con esa misma edad pero en verano (marzo-septiembre), las principales características son la presencia de un anillo ocular rojizo y el color del pico y de las patas, que se vuelve amarillo. 



Los ejemplares juveniles tienen las partes superiores de coloración parda grisácea, con los bordes de las plumas de color grisáceo, lo que les confiere un aspecto escamoso. La cabeza también es de una ligera coloración parda grisácea, con la frente y la garganta blanca. Las plumas de vuelo son más oscuras y es muy característico de esta edad, la presencia de una ancha franja terminal oscura, que destaca notablemente en el resto de cola de color blanco. El pico es negruzco con la base más pálida, mientras que las patas son rosáceas.



Las aves de primer invierno (septiembre-abril) son parecidas a las juveniles, pero la cabeza se parece más a la de los adultos, ya que es más blanca y con un rayado grisáceo. Las partes superiores son de color gris azulado y el panel alar es más liso, menos barrado. La cola es similar a la de las juveniles. Los flancos muestran marcas oscuras en forma de “V”. El pico se vuelve bicolor con la punta oscura y la base gris rosácea. Las patas se vuelven grises con tinte azulado.



Las de segundo invierno (septiembre-marzo) se parecen bastante a los adultos en invierno, pero se diferencian en que las puntas de las alas tienen las manchas negras más extensas. Por el contrario, las puntas de las primarias, tan solo presentan unos pequeños espejos blancos, en vez de los grandes “espejos” de los ejemplares adultos. Ocasionalmente mantienen algunas plumas pardas en las alas y la cola, propias del primer invierno. Las patas y el pico tornan de una tonalidad verde azulada y la banda oscura del pico se hace más ancha.



Las aves adultas en verano presentan una media luna en las terciarias, más patente. Los ojos tienen un anillo ocular rojizo, mientras que el pico es amarillo sin franja oscura y las patas se tornan de un color verde amarillento.



Las principales diferencias con la gaviota de Delaware con la que guarda su mayor parecido, sobre todo con el plumaje del primer invierno, se pueden resumir como:

La G. cana tiene el dorso de un color gris azulado más oscuro que el de la G. de Delaware

La cabeza de la G. cana está menos moteada que en la G. de Delaware.

El pico de la G. Cana es más estrecho y de color rosado más apagado, así como la franja transversal negruzca. En la G. de Delaware están mucho más marcados y contrastan más.

Los ojos de la G. Cana son más redondeados y tienen el iris oscuro, mientras que en la G. de Delaware son un poco más rasgados y con el iris más claro. 



La Gaviota cana es una especie de distribución holártica (hábitats encontrados en los continentes boreales del mundo como un conjunto) de la que están reconocidas cuatro subespecies: “L. c. canus”, que ocupa el norte de Europa, desde Islandia y Francia hasta el noroeste de Rusia y es la más numerosa. “L. c. heinei”, que se distribuye desde el noroeste hasta el nordeste de Rusia y es la más oscura. “L. c. kamtschatschensis”, repartida por el nordeste de Rusia y que es la de mayor tamaño. “L. c. brachyrhynchus”, que ocupa Alaska y el noroeste de Canadá. A esta subespecie de América del Norte, se la conoce comúnmente como "Mew gull" o "Gaviota maullido", aunque esa denominación también es utilizada por algunas autoridades para toda la especie.


Las aves europeas de la subespecie “L. c. canus” son migradoras de corta o media distancia, invernando en las áreas de cría o en zonas próximas, desde el Mar Báltico hasta el norte de Francia, el Mar Adriático y el este del Mar Mediterráneo. 



En España se la considera una especie migradora escasa e irregular que aumenta su presencia en inviernos más fríos. Por las recuperaciones de aves anilladas aquí, sabemos que la mayoría proceden de Alemania, Suecia y Noruega, y corresponden exclusivamente a individuos de la subespecie “L. c. canus”. Sus mayores efectivos se localizan en las costas cantábricas y atlánticas, haciéndose un ave menos frecuente cuanto más se avanza hacia el sur. Resulta muy escasa en Andalucía occidental y en las costas del norte del Mediterráneo. También aparece, aunque de forma muy escasa, en el interior, especialmente durante las olas de frío.


Su hábitat en las zonas donde invernan es en aguas costeras y se encuentra habitualmente en estuarios, desembocaduras de ríos y estanques de agua dulce cerca de la costa, así como en zonas de interior agrícolas y urbanas. No acostumbra a frecuentar los vertederos y rara vez se encuentra en alta mar.



Su dieta alimenticia es omnivora y está basada fundamentalmente en invertebrados acuáticos y terrestres (lombrices), pequeños peces, moluscos y crustáceos, complementada ocasionalmente con pequeñas aves y mamíferos. También, muy ocasionalmente y durante la época invernal, se alimenta de restos de basuras en vertederos y de restos desechados de zonas de manufactura de pescado. 



Se alimenta fundamentalmente en zonas abiertas como estuarios, marismas y lagunas, aunque también lo hacen en praderías recién segadas y en campos de cultivo recién arados. 



Para alimentarse utiliza técnicas muy variadas que van desde la captura de sus presas por persecución directa mientras vuela, camina o nada, hasta practicar la zambullida desde pequeñas alturas o desde la superficie. También comparte el hábito de otras gaviotas de tirar moluscos desde el aire, a un punto sólido de la playa para romperlos y comer el contenido interior. Ocasionalmente, roba las presas o alimentos que otro animal ha capturado, colectado, matado, o preparado (cleptoparasitismo). 



La Gaviota cana ocupa sus lugares de cría desde finales de abril y los abandona desde mediados de julio. Anida en pequeñas colonias, aunque en ocasiones lo hace en solitario. Acostumbra a situar sus nidos en una amplia variedad de hábitats, desde acantilados marinos, islotes cercanos a tierra, playas, marismas, lagos o marjales costeros, hasta páramos fríos alejados del agua, e incluso en ciudades. Sitúa su nido en el suelo sobre la vegetación, formando una pequeña depresión tapizada con hierbas. Acostumbra a poner de 2-5 huevos, que incuban ambos sexos durante 22-28 días. Los pollos vuelan aproximadamente a los 35 días. Alcanzan la madurez sexual al cabo de 3 años de edad.



La Gaviota cana es una gaviota que se halla en expansión y que a nivel global, según los criterios de la UICN (Birdlife Internacional, 2010) se la considera una especie de “Preocupación menor”, debido a su amplio rango de distribución, la tendencia positiva de su población y el tamaño de la misma. En España, se la califica como “De interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.